El trabajo áulico tiene distintos momentos. Adquirir un conocimiento requiere de diferentes estrategias y actividades. La teoría aporta información, pero es necesario tener un espacio de experimentación y comprobación. Esto lo ofrece en la ciencias naturales el laboratorio o la vivencia u observación directa en algunos casos. Tener este espacio despierta en el alumno una expectativa ante cada nuevo conocimiento, lo asocia a experiencias anteriores, y recrea un aprendizaje nuevo.
Desarrollar en el alumno esta metodología de trabajo potencia la curiosidad propia de la edad, incorpora para su vida la necesidad de investigar, comprobar, dudar ante cada instancia de conocimiento, sabiéndose un hacedor de su formación.
A continuar por este camino!
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